Los autobuses de larga distancia (por ejemplo, Flixbus, Sadem, National Express...) no disponen de asientos adecuados para el uso seguro de los niños. No parecen estar equipados para el uso de asientos infantiles homologados o cinturones de seguridad adecuados para niños o bebés.

Sin embargo, si estos servicios estuvieran disponibles, la comunicación en sus sitios web no es clara e inmediata.

Si una familia con niños pequeños quisiera elegir este medio de transporte para un viaje de larga distancia, ¿cómo podría hacerlo con seguridad?

¿Qué soluciones se podrían proponer y planificar?